Por ROMÁN LEJTMAN.

Mario Firmenich estaba a salvo en Cuba y planificaba sus acciones armadas sin asumir la estabilidad política de la dictadura que ya había levantado la Copa Mundial 1978. El líder montonero diseñaba una contraofensiva que implicaba un nuevo sacrificio de los militantes clandestinos y exilados, ante la supuesta posibilidad de vencer al Proceso y abrir el camino hacia una gesta revolucionaria. Fue una masacre que fortaleció al régimen militar y debilitó a la resistencia civil.

Firmenich ejercía en la Torre de Marfil y planificaba acciones que no coincidían con la realidad del país. Pensaba que su aislamiento político y su discurso épico podían derrotar a una maquinaria asesina que tenía la suma del poder público y clandestino. La contraofensiva fue un suicidio montado sobre un relato que sólo existía en la imaginación de la patrulla perdida que operaba en el exilio cubano.

Cristina Fernández designa enemigos en Olivos y alinea sus soldaditos junto a Axel Kicillof, el ministro de Economía que se transformará en la réplica postmoderna de Celestino Rodrigo cuando los barones del peronismo opten por privilegiar su propia supervivencia política. CFK y Axel iniciaron una contraofensiva y creen que servirá para recuperar los votos y el poder, dos variables de la democracia que en el kirchnerismo son una especie en extinción.

La Presidente aplica una estrategia Firmenich para derrotar a los Buitre, salvar su responsabilidad penal y llegar sin sobresaltos al 10 de diciembre de 2015. Cristina, como los Montoneros con la Dictadura, tiene un enemigo acorde a la épica y la redención. Pero su plan es un puñado de frases sin sostén institucional que nos pone al borde de la tragedia política y económica.

La amoralidad de la dictadura se puede alinear con la voracidad de los Buitre. Sin embargo, la coincidencia dialéctica del enemigo a vencer no puede justificar la comisión de errores tácticos empujados por la incapacidad de entender qué está ocurriendo en todo el escenario político. La sentencia de Thomas Griesa es un exceso judicial, pero no es optativa y se debe buscar el mejor camino para cumplirla.

CFK resiste el fallo y esa decisión encierra la lógica de la contraofensiva montada por Firmenich y su consejo de iluminados. Cristina piensa que la ausencia de ética del enemigo avala todos los movimientos para lograr una victoria nacional y popular. Los antecedentes de los Buitre dan una ventaja, pero no alcanzan para derrotar al sistema jurídico de los Estados Unidos y esquivar las consecuencias políticas y económicas del default.

Cristina perfeccionó el método de ‘fuga hacia adelante’ usado por Firmenich para permanecer como líder de una facción política que ya había dejado de representar un ideal o un sentimiento social. En la contraofensiva, el jefe montonero era una caricatura que después mutó en principal responsable de una operación bélica que implicó el asesinato de un puñado de cuadros sobrevivientes de la primera ola de represión ilegal.

La Presidente y su ministro de Economía están forzando una crisis social para preservar los restos de un paradigma que ahora solo existe en su imaginación. El default de los bonistas reestructurados, la caída del poder adquisitivo de los salarios y la situación jurídica de Amado Boudou no se resuelve con una cadena nacional o citando a la empresa que abastecía de artilugios al Coyote y su legendaria incapacidad para cazar al Correcaminos.

Una tribuna de Defensores de Belgrano se llama Ricardo Zuker, militante montonero secuestrado y asesinado en la contraofensiva de 1979.

Firmenich nunca se hizo cargo.

Por Gustavo Sylvestre

La decisión pareciera ya estar tomada en el núcleo duro del kirchnerismo: Cristina Kirchner no bendecirá ningún candidato del Frente para la Victoria para la elección del año próximo. A falta de un ‘candidato puro’ que por ahora no asoma, la Presidenta dejará que todos los que quieran presentarse a las PASO lo hagan y compitan allí. Recién después, y con el resultado de la misma en la mano, definirán qué postura tomar.

La Cámpora es la principal agrupación política que está impregnada de esta convicción. Sostienen, algunos de sus integrantes, que para ellos el partido comienza a jugarse en el 2015 y apostarán para la elección que viene a colocar a sus militantes en las legislaturas provinciales y en el Congreso de la Nación y en intendencias.

Hay varios motivos para esta decisión. Algunos sostienen que apoyar a un candidato que no los representa es quitarle a Cristina el rol de ‘conductora‘ del Frente para la Victoria que buscará retener más allá del 2015.

Segundo, que al no contar con un candidato puro, el partido para ellos será crecer desde el llano y desde los puestos electivos que obtengan.

Y tercero, creen con convicción que las corporaciones a las que se han enfrentado en estos años y los ‘medios opositores’ no dejarán crecer ningún candidato bendecido por la Presidenta.

La operación Kicillof fue abortada y ni siquiera está en los planes del Ministro, hoy más preocupado en observar que la economía no se desmadre y evitar males mayores que conviertan al último año de la gestión de la Presidenta, en un malo recuerdo para los argentinos.

El ejemplo práctico de esta decisión se vio el viernes pasado, en el exitoso acto organizado por el Movimiento Evita que logró movilizar en torno a la pre-candidatura presidencial de Jorge Taiana, un importantísimo número de su militancia, y que será repetido en distintas provincias de nuestro país. En las conversaciones previas, se había acordado la presentación en el acto del referente de la Cámpora Andrés ‘El Cuervo’ Larroque, que incluso iba a ser uso de la palabra. Pero finalmente, se abstuvieron de participar.

Lo mismo pasó con el lanzamiento de la pre candidatura del Ministro de Defensa, Agustín ‘El Chivo’ Rossi en Rosario, donde no hubo representantes de este sector.

Estiman que la presencia de uno de ellos podría estar significando un virtual apoyo de Cristina, gesto que por lo explicado anteriormente, no están dispuestos a realizar.

“La Presidenta dio luz verde a todos, y todos pueden jugar, nadie tiene coronita ni bendición, lo único que ha pedido es que los que tienen obligaciones de gobierno, no descuiden la gestión” indica un Ministro nacional.

“Cristina está más que ocupada con el tema de los Fondos Buitre, que la tiene obsesionada, no tiene tiempo ni siquiera para pensar en candidatos, que todo fluya, hay que estar muy encima de la gestión para que nada se desmadre” indica otro funcionario de la Presidenta.

Desde el sciolismo, donde han decidido poner primera y arrancar sin miramientos en torno a la candidatura de Daniel Scioli, estiman que “la interna se arreglará sola una vez que Insaurralde salte al massismo”. Desde ese sector político entienden que allí “Daniel quedará con la candidatura presidencial y que las circunstancias políticas del espacio obligarán a Florencio Randazzo a jugar en la provincia, donde cosecha un porcentaje importante de adhesiones”.

Si bien en el Plan Insaurralde tomar una decisión estaba hacia un futuro, después de su promocionado casamiento con Jesica Cirio, diputados del kirchnerismo, en base a una propuesta de la Diputada Elisa Carrió, creen haber encontrado la fórmula para ‘apurarlo’ en la toma de esa decisión.

Carriò ha dejado trascender que presentará un proyecto de ley para que aquellos diputados que no hayan renunciado a otro cargo electivo, como ser Intendente, deben optar por uno de los dos, es decir renunciar a uno. Está bien encaminada la idea de la diputada, para transparentar la política en la Argentina. De esta idea se han agarrado los diputados Landau y Kunkel, que apoyarán la iniciativa y buscarán rápidamente convertirla en ley.

Había trascendido que Insaurralde había proyectado: casamiento, vuelta a la Intendencia y después pase al massismo. Habrá que ver si los tiempos no se le anticipan.

Unen, Desunen
“Frío Invernal” así califica uno de los dirigentes del espacio opositor, la actualidad en el mismo, tras las declaraciones de Elisa Carrió, que no sólo se anotó en la carrera presidencial, sino que acusó a los líderes del espacio de no tener estrategia, de “tontos” y blanqueó su idea de acordar con el PRO y sectores del peronismo no massista.

“Esto va a seguir así hasta el día antes en que haya que cerrar las alianzas, el año que viene” sostiene el mismo dirigente.

Ayer los líderes del espacio debían reunirse, y la reunión fue postergada hasta la semana próxima, para no actuar “en caliente”.

“Por más que digamos puertas adentro que no queremos una alianza con Macri, no alcanza, porque Carrió insistirá en la misma y hay muchos radicales que trabajan en la misma dirección”, sostienen.

Por lo tanto, creen que las encuestas y los posicionamientos de sus dirigentes, determinarán el futuro del espacio.

Por Martín Dinatale.

Por lo que se desprende de los últimos mensajes de Cristina Kirchner y de sus ministros, el mundo se puso de acuerdo para atacar y confabular contra la Argentina en forma simultánea.

Para el relato oficial los enemigos externos del país en estos días no sólo son los fondos buitre sino también la Organización Mundial del Comercio (OMC) y la prensa internacional, entre otros.

Ataque de los buitres. En su dura embestida contra los fondos buitre la Presidenta destacó que "algunos podrían verse tentados a ver los recursos que tenemos en América del Sur". Así, deslizó un presunto ataque de los holdouts al petróleo argentino. "Cuando un país tiene determinadas riquezas, puede llegar a convertirse en un problema", reconoció. No lo hizo en una tribuna partidaria o en medio de la militancia camporista. Las palabras elegidas por Cristina Kirchner se dieron en la cena anual de Camaradería de las Fuerzas Armadas. En el encuentro con toda la cúpula castrense que la recibió en el Edificio Libertador, la Presidenta destacó: "La defensa de la Nación es una sola cosa, frente a ella nadie puede bajar la cabeza y aceptar la imposición indigna que viene del extranjero", dijo.

¿Acaso la Presidenta maneja en forma reservada una hipótesis de conflicto externo que todos desconocemos? ¿Estan en juego los recursos naturales del país y sólo unos pocos lo saben? Nadie responde. En el Ministerio de Defensa aclararon que sólo se trató de un mensaje "figurativo" en alusión a las intenciones de los fondos buitre de embargar cuentas y activos de YPF en todo el mundo.

De todas maneras, está claro que Cristina Kirchner sólo recordó el valor de las Fuerzas Armadas en relación a la protección de recursos naturales cuando acechan los holdouts con sus reclamos de bonos argentinos impagos. La jefa del Estado debería recalar en el rumbo que viene marcando desde hace mucho tiempo Brasil en cuanto a rol de la defensa por los recursos naturales. El ministro de Defensa y ex canciller, Celso Amorin, señaló hace unos meses que "Brasil debe contar con un efectivo sistema de disuasión militar que le permita proteger eventuales riesgos a los recursos naturales como la energía, el petróleo, el Amazonas, la biodiversidad y la capacidad de producción de alimentos". Claro que la estrategia que plantea Amorim para las Fuerzas Armadas está perfectamente coordinada con Itamaray, ya que la diplomacia brasilera viene planteando desde hace muchos años la necesidad de establecer un plan estratégico de defensa de los recursos naturales. No hace falta esperar a un conflicto como el que tiene la Argentina con los fondos buitre para acordarse del valor que tienen las Fuerzas Armadas en el nuevo contexto mundial de cara a un futuro escaso en recursos naturales.

Las quejas de la OMC. El viernes pasado la OMC falló en contra de la Argentina por las "medidas que afectan a la importación de mercancías" en una disputa iniciada por Estados Unidos , la Unión Europea (UE) y Japón debido a las trabas comerciales. El panel conformado por tres árbitros dictaminó que la Argentina violó reglas internacionales de comercio al comenzar a aplicar -en febrero del 2012- licencias de importación no automáticas.

Estados Unidos, la UE y Japón habían iniciado la demanda en mayo de 2012. Las tres economías consideran que la manera en que la Argentina limita el ingreso de productos importados "no es transparente, se aplica de manera arbitraria y restringe ilegalmente el comercio". La Argentina adelantó que apelará a ese fallo y cuestionó a los países demandantes. Algunos ministros evaluaron que "resulta casual que el fallo se dé en momentos en que la Argentina entabla una dura pelea con los bonistas". Allegados al canciller Héctor Timerman dijeron a LA NACION que en el Gobierno hay tranquilidad porque la estrategia de la Argentina será frenar una eventual catarata de sanciones de los países demandantes con una apelación y el proceso llevará más de un año. Si la apelación es rechazada y se mantienen las restricciones comerciales, los demandantes podrían pedir a la OMC una autorización para aplicar sanciones. Pero en la Casa Rosada creen que eso no será factible y en tal caso para que se ejecute habrá pasado más de un año.

Por el contrario, en el Gobierno creen que tanto la UE como Estados Unidos instrumentan en forma permanente medidas proteccionistas como las que impone la Argentina y sostienen que los ataques de esos países en la OMC son "injustos".

Críticas de la prensa. El diario francés Le Monde publicó ayer un furibundo editorial contra el Gobierno en el que planteó que el "gradual descenso al infierno" de la Argentina en los últimos 70 años recuerda que las diferencias entre naciones se deben más a los gobiernos que a tener recursos naturales. Además, cuestionó el "clientelismo estructural", la "fuerte injerencia" del Estado en el ámbito privado y el "poco respeto" de los derechos de propiedad que hoy despuntan en la Argentina. También el diario de la intelectualidad francesa destacó "la negación de la realidad" y un "carácter suicida" que existe en estos momentos en el país por "la negación a vincularse con el mundo". Desde el Gobierno no hubo una respuesta formal a Le Monde. Pero algunos funcionarios consultados opinaron que las críticas de la prensa francesa responden a "intereses de determinados sectores de poder" de Francia. ¿Acusarán en tal caso a los sectores de izquierda que representa Le Monde? Imposible. Cristina Kirchner ya lo dijo la semana pasada en un acto: "A mi izquierda no hay nada más. Esta la pared".