IAPG ENCABEZADOPAN AMERICAN ENERGY (CABECERA
WEGTGN
SECCO ENCABEZADOALEPH ENERGY ENCABEZADO
PRELASTKNIGHT PIÉSOLD ENCABEZADO
SACDE ENCABEZADOINFA ENCABEZADO
RUCAPANELMETSO CABECERA
Induser ENCABEZADOSAXUM ENGINEERED SOLUTIONS ENCABEZADO
GSB CABECERA ROTATIVOFERMA ENCABEZADO
METROGAS monoxidoMilicic ENCABEZADO
PIPE GROUP ENCABEZADGRUPO LEIVA
cgc encabezadoGenneia ENCABEZADO
BANCO SC ENCABEZADOPWC ENCABEZADO ENER
WICHI TOLEDO ENCABEZADOJMB Ingenieria Ambiental - R
WIRING ENCABEZADOCRISTIAN COACH ENCABEZADOCINTER ENCABEZADO
EVENTO LITIO ENCABEZADOBANCO SJ ENCABEZADONATURGY (GAS NATURAL FENOSA) encabezado
OMBU CONFECATSERVICIOS VIALES ENCABEZADO ENER
ANÁLISIS
Laborda: Debuta el dólar libre. Zaiat: Salarios en el blanco
17/12/2015

Debuta hoy el dólar libre: ¿y si el BCRA en vez de vender, debe comprar?

Ambito

GUILLERMO LABORDA

Lo mejor de Alfonso Prat Gay ayer fue mostrarse calmo en medio de la alta expectativa existente sobre el rumbo del tipo de cambio en Argentina. Hasta se dio el lujo de bromear en medio de la conferencia de prensa ayer sobre el "nuevo Moreno", Miguel Braun. Hizo recordar a la conferencia de prensa del 28 de julio de 1996 en Casa de Gobierno del ministro Roque Fernández cuando debía anestesiar mercados tras la remoción de Domingo Cavallo dispuesta por Menem. Al fin y al cabo Prat Gay estaba anunciando la devaluación más cantada de la historia económica argentina. Nunca antes personas y empresas tuvieron tanto tiempo para prepararse para el evento de hoy. Hubo récord de compras de dólar ahorro mes a mes, uso masivo de tarjetas en el exterior, importaciones aceleradas, exportaciones ralentizadas y como broche, el subsidio del BCRA a las operaciones a futuro. Así quedaron las reservas del BCRA después de eso.

Para la apertura de las operaciones hoy hay un dato que no debe pasar desapercibido: hay 17.000 millones de dólares comprados a futuro (merced a las ventas que hiciera el BCRA) que están listos para tomar ganancias. La mayoría se operó a fin de marzo a $10,80 en promedio. Para liberar las garantías comprometidas para hacer esas operaciones de futuro, y concretar en el acto de jugosas utilidades (más allá de los recargos aplicados en Rofex), habrá muchos que saldrán a vender dólar a futuro. Y este fenómeno tendrá un impacto inmediato en el mercado contado del dólar, dado que actuará presionándolo a la baja. Otro punto: los sistemas de los bancos no están listos como para absorber la normativa del BCRA difundida ayer cerca de la medianoche. Fue una noche larga para los gerentes de sistemas de bancos. Por ello es que la demanda de dólares de empresas hoy no será muy fuerte, más teniendo en cuenta que el stock por pago de importaciones se canalizará en cuotas (vía bono o no).

El público, ya con tipo de cambio a $ 14 o al nivel que resulte hoy, no tendrá tanto incentivo para lanzarse a comprar. Menos con tasas mayores 30% anual en pesos. No habrá más "puré o por lo menos en el nivel en el que se vio este año: el "blue" seguramente tendrá una brecha de 5%-10% con el dólar liberado. Una alternativa que surgirá hoy es la que explicó anoche a este diario el economía Nicolás Dujovne. Señaló que habrá "carry trade", operatoria consistente en vender dólares y con los pesos comprar Lebac al 38% anual a tres meses. En simultáneo se podrá comprar dólar a futuro también a 3 meses, con tasa implícita más baja, eventualmente del 25% anual , obteniéndose así la diferencia de rendimiento, un 13% por ejemplo, de aire. ¿Y si el BCRA termina comprando dólares en la jornada de hoy?

Podría ser dado que las cerealeras arrancarán con ventas por 400 millones de dólares. En la Bolsa, el valor de referencia del "contado con liqui" fue ayer de $ 14,26. Se operan aproximadamente 40 millones de dólares diariamente. Gran parte del volumen de bonos y acciones en el recinto bursátil (era para concretar el CCL), pasará ahora al mercado único de cambios. Prat Gay y Sturzenegger podrán elegir hoy la estrategia sobre el dólar: marcar un valor alto, cercano a 15 pesos para luego hacerlo retroceder, o bien directamente dejarlo bajar más y hasta darse el lujo de intervenir pero con el BCRA comprando divisas. Por ello ayer el ministro de Hacienda y Finanzas bromeaba.

 

Salarios en el blanco

Página 12

Alfredo Zaiat

Resulta ilustrativo exponer la secuencia de las medidas económicas del gobierno de Macri, como propuso al inicio de su conferencia de prensa el ministro Alfonso Prat-Gay, para comprender cuál es su objetivo central. La megadevaluación anunciada ayer, sin precisar el “número mágico” pero sugerido en 14,25 pesos (como mínimo equivale a un alza del 45 por ciento respecto del tipo de cambio oficial de ayer), es una de las principales iniciativas pero no la única del plan económico. La desproporcionada alteración de la paridad cambiaria forma parte de un paquete que tiene un blanco predeterminado: la definición de un nuevo estadio de la distribución del ingreso, regresivo a partir de ahora rompiendo con la tendencia de los últimos años. Esto será así porque se está afectando en forma negativa el poder de compra de trabajadores y jubilados, con la lejana promesa de un acuerdo social para convalidar ese retroceso. Detrás de la presentación marketinera “fin del cepo”, lo que se anunció fue una megadevaluación con el objetivo es bajar la incidencia del salario (en pesos y en dólares) en el costo de las empresas. La fuerte transferencia regresiva de ingresos es indudable y no se logra disimular con la alegría que buscó transmitir Prat-Gay por terminar con las restricciones para la compra de dólares. Es una alegría sorprendente teniendo en cuenta la historia económica argentina con las bruscas devaluaciones.

Previo a detallar el recorrido de las medidas es conveniente saber que no era necesario semejante ajuste en ninguna de las variables económicas. La economía argentina no está en crisis aunque sí enfrenta tensiones cambiarias, inflacionarias, fiscales y del sector externo. Solo el repiqueteo –acción que está proponiendo el macrismo para la difusión de análisis económicos en los grandes medios amarillos– de la falacia acerca de la inexistencia de reservas y del desborde del déficit fiscal justifican los bruscos cambios que Macri dispuso en retenciones, en el tipo de cambio y en la administración del comercio exterior. Es una decisión política deliberada realizar un ajuste de semejantes proporciones. Ajuste que no se inició con la efectivización de las medidas, sino cuando fueron anunciadas el mes pasado por sus economistas. Por eso en la evaluación de la actual gestión económica no hay que estar distraídos y saber que comenzó en noviembre, pese a la intención de Prat-Gay de eludir esa carga al señalar que su referencia son los precios del 30 de noviembre. Adelantar iniciativas que históricamente aquí y en cualquier otro país son informadas de un día al otro para evitar especulaciones y comportamientos defensivos de agentes económicos fue una de las innovaciones de los economistas de Macri. Por eso la inflación y el deterioro de la actividad económica de noviembre, extendido con mayor intensidad en este mes, es responsabilidad de Macri, aunque su ministro de Hacienda y Finanzas pretenda desentenderse.

La sucesión de medidas comenzó con la eliminación de las retenciones a las exportaciones del complejo agrario –y reducción de 5 puntos a las de la soja–, de economías regionales e industriales. Significa una transferencia de ingresos de unos 30 mil millones de pesos anuales teniendo en cuenta un valor del dólar de 9,80, que se eleva a unos 60 mil millones de pesos en 2016 al nuevo tipo de cambio entre 14,50 y 15,00 pesos. También implica un aumento de los precios internos de esos productos de exportación y de sus derivados (por ejemplo, el cerdo que se alimenta con maíz). El impacto inflacionario de esa medida no puede disimularse.

Prat-Gay reiteró una confusión deliberada para justificar su megadevaluación afirmando que el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner en ocho años lo hizo “en 230 por ciento” (para no cultivar la ignorancia vale señalar que no existe una devaluación del 100 por ciento –desaparición de la moneda–, lo que hubo fue un aumento del tipo de cambio en esa proporción). La diferencia sustancial es que esa variación fue en ocho años con una política de ingresos progresiva que permitió avances en términos reales del salario y las jubilaciones. En cambio, el fortísimo ajuste cambiario de Prat-Gay es aplicado en un solo día sin ninguna iniciativa de compensación en los ingresos de trabajadores y jubilados. Integrantes de esos grupos sociales que se sentían bajo tortura financiera porque no podían comprar dólares libremente, ahora no lo van a poder hacer por el alza de la paridad y por la caída de la capacidad de ahorro porque el shock inflacionario está deteriorando el presupuesto familiar. No podrán comprar dólares pero lo harán con alegría.

El otro paso del plan económico de Macri es la apertura comercial, liberalizando las exportaciones de productos de la canasta básica y la eliminación del principal instrumento (DJAI) para evitar el ingreso irrestricto de importaciones. Lo primero presiona aun más sobre la tasa de inflación por el lado de la competencia entre el abastecimiento interno y las ventas al exterior y por el impacto pleno del precio internacional en el mercado local. En sentido contrario, las importaciones servirán para frenar los aumentos de precios pero con consecuencias negativas sobre la producción nacional y el empleo. Es una estrategia de menos inflación con más desempleo.

La medida no mencionada ayer por Prat-Gay pero que constituye otro pilar importante del programa contra el salario es la reducción y hasta eliminación de los subsidios en servicios públicos esenciales (inicialmente en luz y gas; sin definiciones por ahora en transporte). Aquí la obsesión es el nivel de gasto público y el déficit fiscal, entonces buscan compensar la pérdida de recursos por la eliminación de retenciones con menores subsidios. Pero la megadevaluación aumentará esa cuenta por el costo de la energía importado, salvo que también lo trasladen al consumidor, lo que las tarifas subirían todavía mucho más de la estimación inicial. Un alza que se reflejará en la tasa de inflación.

Para sostener estos cuatro frentes del plan económico (retenciones, devaluación, apertura y menores subsidios) que provocan un shock inflacionario que el Indec-Todesca anunció que no medirá, Prat-Gay apelará a la suba de la tasa de interés para desalentar la compra de dólares y al endeudamiento desenfrenado. Fue impactante la alegría expresada por el ministro cuando informó que no serán 10 mil millones de dólares, sino de 15 mil a 25 mil millones de dólares el monto del blindaje financiero. Es un paquete de deuda que estará completado en cuatro semanas, confió el ministro. Por ahora se tiró a una pileta que sólo estará abastecida con 400 millones de dólares diarios por adelantos de las exportadoras de cereales. Además, disparar la tasa de interés tiene un efecto negativo sobre el nivel de actividad con el objetivo de no alimentar la corrida cambiaria. Es recesivo y una trampa de difícil salida, como enseñan situaciones similares de las décadas del 70 y 80.

El plan económico de Macri, que tiene la innovación de un ministro presentando una megadevaluación con alegría por el “fin del cepo”, apunta a redefinir una distribución regresiva del ingreso. El salario y las jubilaciones quedaron alcanzados de ese modo por el dardo de Prat-Gay.


Vuelva a HOME

;