Ing. Héctor Velázquez Alvarez

En referencia a los conceptos vertidos por el gobernador Sergio Uñac y el ministro de Minería, Alberto Hensel, en cuanto a evaluar la posibilidad de implementar en nuestra provincia una empresa que sea similar a la Enami en Chile, quisiera aportar muy brevemente lo siguiente: A los fines de resolver los graves problemas que padecía la pequeña minería, en 1996 se aprobó un 'Reglamento de Programas Técnicos', a partir del cual la Empresa Nacional de Minería (Enami) puso a disposición de este sector, un conjunto de 'herramientas de fomento' destinadas a mejorar y a reasegurar su competitividad productiva y empresarial.

Las razones que motivaron esta histórica decisión fueron esquemáticamente las siguientes: La absoluta convicción de que el 'negocio de la pequeña minería' como una actividad sustentable en el mediano y largo plazo necesitaba de los esfuerzos del país a través de la Enami; la certeza de que estos esfuerzos como 'herramientas de fomento productivo', debían contemplar las diferentes etapas que conforman un proyecto, y la clara decisión, de que estas herramientas materializadas en 'subsidios de distinta naturaleza', debían orientarse al alumbramiento de reservas, estudio de factibilidad, desarrollo de mina, explotación minera y beneficio de minerales.

Desde lo que hace a su misión, la Enami representa una entidad estatal de administración autónoma, destinada a 'impulsar y vigorizar la actividad minera nacional, contribuyendo a hacer sustentables los negocios y empresas mineras de pequeña y mediana escala' y desde lo que hace a sus objetivos, una empresa destinada a 'fomentar la explotación y beneficio de toda clase de minerales, procesarlos y comercializarlo; proporcionando diversos servicios, entre ellos, servir de intermediario de los productores mineros para el mercado internacional'.

La política de fomento consagrada por la Enami, se sustenta básicamente en 2 programas: Un programa de desarrollo minero, cuyo objetivo es la captación y apertura de nuevas minas y/o emprendimientos productivos, y un programas de desarrollo productivo, cuyo objetivo se orienta a aumentar los perfiles de producción de las faenas en actividad, lo que redunda en un incremente de mano de obra y empleo, y un crecimiento de las capacidades empresarias de los pequeños mineros.

La Enami es en lo práctico-operativo, una empresa maquiladora que compra materias primas (minerales en bruto, concentrados etc.), y una empresa procesadora de minerales en sus propias plantas. En esta condición, los minerales adquiridos a los pequeños mineros en todo Chile, son tratados íntegramente en las plantas de beneficios de la Enami. Como una empresa generadora de divisas para Chile, sus principales mercados son para el cobre electrolítico: China, Japón, Francia; Taiwán, Chile; para el oro electrolítico: EEUU y Chile, y la plata electrolítica: EEUU, Brasil y Chile.

La Enami es por esencia, la reguladora del Mercado Minero Nacional, y en tal condición determina la tarifa para los Minerales (Mejor valor de compra del mundo); otorga asistencia crediticia de corto y largo plazo; impulsa diagnósticos y programas de reinversión en diferentes regiones para fortalecer las acciones de reconocimiento minero, genera estrategias de crecimiento y desarrollo regional y actúa como agente en representación del Estado, en el desarrollo de proyectos mineros en conjunto con inversionistas privados nacionales.

Desde el ámbito Legal, realiza estudios de títulos y propiedad minera; desde el Técnico ejecuta estudios de evaluación de reservas, preparación y desarrollo, diseños de explotación y procesos metalúrgicos; desde el Económico realiza evaluaciones económicas y define criterios de rentabilidad; desde el Financiero, orienta su actividad hacia la captación de capitales de riesgo, captación de recursos para el proyecto de inversión, como también, hacia la transferencia tecnológica en gestión minera y en uso de equipos y procesos metalúrgicos. Desde el ámbito minero ambiental aplica un sistema predictivo de impacto ambiental.

En la Enami trabajan 2.500 personas entre administrativos, operarios, técnicos y profesionales, personal que en conjunto se distribuye en: 2 fundiciones, 1 refinería, 4 plantas de beneficios de minerales, 4 gerencias regionales, 12 oficinas mineras y de compras de productos mineros y 1 oficina matriz - Santiago de Chile.

El verdadero efecto bisagra que desde sus inicios generó Enami, muestra que en 1996, la primera inversión de U$S 243.160 destinada a la ejecución de un Programa de Sondajes de Aire Reverso que favoreció a 87 pequeños mineros, permitió cubicar 500.000 toneladas de mineral, cuyo valor comercial ascendió a los 15.000.000 de dólares. Espero que esto contribuya a vigorizar la necesidad de adoptar una política de acción, que permita diseñar un plan de desarrollo minero sanjuanino, consustanciado con una política del Estado provincial, en el marco de un pensamiento minero nacional.

* -Ingeniero de Minas.