Por TALO PISANI HÉCTOR MAURIÑO.

Los artículos "El extraño magnetismo del señor Schvartzbaum" y "El olor del petróleo" corrieron un velo sobre procedimientos sospechosos en el negocio petrolero.

Expusieron el caso de la asignación del área Amarga Chica, en el corazón de Vaca Muerta. Entonces -año 2010- un peso pesado como YPF se asoció con una empresa ignota y sin capacidad de inversión. Fue en la era Eskenazi (Grupo Petersen), cuando la petrolera hoy reestatizada estaba bajo control de Repsol. Concretamente YPF formó sociedad con Miguel Schvartzbaum -titular de la casi desconocida Petrolera Argentina- en una unión transitoria de empresas en la que YPF participaba con el 51% y P.A. con el 49. Esta UTE ganó la licitación de Amarga Chica en agosto de 2010. Pero, sorpresivamente, unas pocas semanas después, P.A. le transfirió a YPF el 24,5% de las acciones por 4,4 millones de dólares. Todo bajo la anuencia del gobierno neuquino, que tenía garantizado el 10% del negocio a través de Gas y Petróleo (GyP). Años más tarde y agobiada por su crisis, P.A. le terminó vendiendo el resto de las acciones, cotizadas en por lo menos u$s 40 millones.

Petrolera Argentina no invirtió un centavo en Amarga Chica.

Para más datos, Schvartzbaum tuvo durante años el curioso privilegio de haber obtenido una millonaria ayuda en subsidios y préstamos de organismos municipales, provinciales, nacionales y hasta gremiales, que superarían los 150 millones de dólares. Pese a ello, sus refinerías de Cutral Co tuvieron que ser rescatadas recientemente para evitar el cierre. Parte del dinero no ha sido devuelta y una porción de los créditos se refinanció. Muchos de esos valores permanecen en el misterio.

¿Es el caso Amarga Chica la punta de un témpano? Amén del caso Petrolera Argentina, hubo otras empresas con escasos antecedentes y experiencia hidrocarburífera que obtuvieron áreas asociadas a YPF y que transfirieron rápidamente sus derechos por cifras millonarias: Rovella Carranza y Rovella Energía.

Un protagonista de esas adjudicaciones fue Guillermo Coco, actual ministro de Energía de la administración Sapag. Mantuvo control sobre GyP, la empresa que asignaba las áreas, y comandó la Fundación Alejandría, que se nutría de fondos que obligatoriamente debían aportar las empresas beneficiadas con el negocio petrolero. "Río Negro" lo entrevistó para que explique por qué el gobierno permitió estas maniobras. También para que clarifique las sospechas que existen sobre las sociedades particulares que creó y mantiene abiertas, y sobre Fundación Alejandría, denunciada por manejar fondos sin control.

Aquí las respuestas más relevantes de una entrevista mucho más extensa.

-No podemos entender cómo en 2010 el gobierno le entregó la concesión del área La Amarga Chica a la UTE YPF-Petrolera Argentina, considerando que esta última no tenía antecedentes en la materia, ni recursos financieros y sin que pagara canon. ¿Sabían quién era Schvartzbaum?

-Yo a Schvartzbaum lo conozco hace 15 años. Del mercado. Cuando compró la refinería. Digo: no sea cosa que este hombre acaba de cobrar 44 millones (por la última transferencia de acciones a YPF), nosotros defendiéndolo y resulta que esos 44 palos se los lleva a la mierda, y nosotros quedamos como sus socios o como reverendos boludos. Por eso a través de GyP, cuando nos enteramos de las operaciones que se hacían, sacamos una circular de la empresa con la obligatoriedad de presentar todas las operaciones financieras que se hicieran, porque empezamos a detectar que se vendían y nos mentían las grandes compañías sobre los valores que pagaban.

-¿Cómo explica que Petrolera le haya vendido el 24,10% de su participación a YPF a sólo dos meses de que la UTE resultara adjudicada con La Amarga Chica?

-Esa operación (u$s 4,4 millones) ni siquiera la teníamos registrada en GyP. Empezamos a pedir explicaciones cuando nos enteramos de otra operación, de otra empresa que se transfiere y que hay dinero de por medio.

-¿Y GyP no podía hacer nada ante esa sospechosa operación?

-No, porque… lean ustedes el contrato de UTE: dice que directamente GyP puede o no aceptar una transferencia de un porcentaje de un socio y puede -en caso de rechazarla- tomar la primera opción. Lo que empezamos a detectar es que el negocio no sólo era financiación sino también dinero cash.

-¿Cómo entró Schvartzbaum a la UTE por Amarga Chica?

-Schvartzbaum, con la idea de que iba a ser una gran refinería, necesitaba estar integrado para no tener que depender de otros. Necesitaba su propio crudo, y lo iba a encontrar solamente en áreas. Lo que nosotros le dijimos a todas las empresas es: "Muchachos, primero van a tener que poner la plata ustedes, la provincia no va a ponerles un peso a riesgo y después -acuérdense en esa época no se perforaba- lo correcto sería que traten de asociarse a alguna operadora con porcentajes tales que ustedes pongan la plata, pero que alguien les maneje el "know how". De las empresas que decían 'nosotros ponemos plata, el Estado no', quedaron finalmente Rovella, Schvartzbaum, Raiser... no sé si habrá quedado alguna más dando vueltas... quedó Medanitos...

-Petrolera Argentina no tenía muchos recursos que digamos. Tampoco experiencia.

-No, ninguno tenía, por eso era la idea…

-Pero tampoco había invertido.

-Se lo chupó todo… Lo que me dice el gobierno nacional -le tiró el IGJ (Inspección General de Justicia) arriba- es que el tipo metió toda la guita ahí.

-Pero ustedes siendo socios podían haber planteado…

-No, no podés plantear nada.

-…que cumplan.

-En realidad, los objetivos los venía cumpliendo YPF. Nunca se dejó de invertir el dinero en Amarga Chica. Lo que YPF tenía era una cuenta abierta con intereses del crudo que le tomaba, de las inversiones, pin pun pan. Yo te soy sincero. Hasta en un momento, cuando todavía tenía contacto con YPF, hablé con ellos, antes de que Schvartzbaum terminara con el Refino Plus (el plan de subsidios que otorgó Nación), de la posibilidad de que nos quedáramos con la refinería, el área.

-¿Schvartzbaum cuánto recibió?

-Creo que debe haber recibido no menos de 150 millones verdes, verdes, a fondo perdido. Te puedo asegurar que cuando recibió el Refino no lo podía creer.

-¿Qué hizo Schvartzbaum con ese dinero?

-No. Está toda invertido en la refinería. Y según la Sigen, la empresa metió todo ahí. Pero lo que pasa es que para mover eso necesitás un capital de trabajo de por lo menos 45 millones de dólares.

-En Amarga Chica se había presentado también Entre Lomas, que propuso más inversión pero no le adjudicaron...

-Te soy sincero, no recuerdo…

-¿Era condición sine qua non que empresas como YPF debían asociarse a estas firmas soporte?

-No.

-Cuesta entender que YPF sea socia de...

-Podía decirte que es peor lo de Rovella, más dudoso…

-¿Cómo más dudoso?

-Era mucho más razonable Schvartzbaum -que quería tener crudo- que Rovella que era una constructora que se quería meter en el petróleo. Por lo menos Schvartzbaum era un tipo del palo, con una refinería a la que le estaban entrando fuertes sumas de dinero por Refino Plus; que tenía un contrato político con YPF.

-Cuando ustedes adjudicaron Amarga Chica, ¿no se conocía el informe de la secretaría de Energía de EE. UU. sobre el valor de Vaca Muerta?

-No. En esa época (2010) las áreas no valían nada. Cero. Nadie sabía que había shale oil… En el medio, había una fuerte presión inicial de las empresas de servicios, constructoras y demás de la posibilidad de crecer en la cadena de valor en la provincia y sumarse a áreas marginales o áreas secundarias para poder explorar.

-¿Qué empresas?

-Ingeniería Sima, Riva, Codal, Edevesa, San Andrés…

-¿Rovella?

-No. Rovella viene de la mano de grupo Petersen.

-¿La empresa de Sortino (Raiser) no estaba?

-Moneta es Raiser… Moneta se presentó y ganó Cruz de Lorena, después se la vendió a Shell, que fue una operación mucho más importante.

ÍTALO PISANI

HÉCTOR MAURIÑO

La Fundación Alejandría está en la mira. Fue creada por Gas y Petróleo (GyP). Le adjudicaron "misiones de responsabilidad social empresaria" y capacitación de los técnicos de la empresa estatal y de la Subsecretaría de Hidrocarburos.

Una cláusula incluida en la concesión de áreas hidrocarburíferas obliga a las petroleras a hacer un aporte, de 50.000 a 300.000 dólares. Precisamente por esos fondos, la diputada Beatriz Kreitman (CC-ARI) cree que hay una fuente de corrupción. Por eso fue a la Fiscalía de Delitos Patrimoniales con una denuncia y ya se la aceptó como querellante.

Coco niega maniobras oscuras y asegura que estos aportes van a la Fundación "por razones impositivas" y que dejaron un superávit de 12 millones de pesos.

-¿Qué controles tienen GyP y su Fundación Alejandría?

-Esperen a la Justicia. Todo se rinde.

-La sensación del ciudadano común es que GyP, sociedad anónima, no da explicaciones de los yacimientos, que no son de GyP, son de la provincia.

-No, no. Los derechos son la provincia y la propiedad es de la provincia. La concesión, se la da la provincia a GyP.

-¿Qué organismos controlan hoy a GyP?

-Contaduría General, porque hay que presentar los balances, y lo controla Fiscalía de Estado y el Tribunal de Cuentas. Cualquier informe que llega de diputados se contesta. Porque la Bolsa, déjenme que les explique eso... Nosotros nunca tuvimos la idea de abrir GyP al capital privado.

-¿Ah no?

-No, no, no. Jamás dijimos que lo íbamos a abrir al capital privado.

-¿Porque lo llevaron a la Bolsa entonces?

-Por una cuestión de transparencia, aunque parezca mentira. Dijimos: "esta empresa vale un paquete de plata, la hicimos valuar: 1.400 millones de dólares de activos". ¿Qué pasa si esto realmente se cristaliza y empiezan a fluir fondos y Vaca Muerta es lo que todos pensamos que va a ser? La idea es abrirla para que el Banco Provincia compre el 5,5. Es decir, ya flota libremente su acción pero no lo liberás al capital privado. Y por otro lado hiciste una compañía amigable: que cualquier empresa que quiera poner guita en un yacimiento vea los estados contables de GyP, las operaciones que hace…

-¿Pero están los balances? Tampoco vemos los de la Fundación Alejandría.

-Están. Se los mando hoy mismo.

-¿Tiene sentido entonces mantener la cláusula que obliga a las empresas a aportar dinero?

-Sí, sí. Es una manera de financiar a nuestros técnicos. También nos permite hacer responsabilidad social. En la cuenta hay alrededor de 12 millones de pesos.

-¿Por qué van a la fundación esos aportes?

-Esos aportes decidimos que lo manden directamente a la Fundación por razones impositivas…

-¿Los fondos de GyP no se destinan a otras cuestiones?

-Poco. Algo de responsabilidad social…

-¿Nada a campaña política?

-Nooooo. Si hay algo por lo quiero que me recuerden es que fuimos junto al gobernador los que armamos GyP.

-¿Era necesario el avión que se compró para GyP? (Un Beechcraft King Air B200)

-No. Como yo no le puedo transferir fondos al Estado para comprar un avión bimotor-camilla como quería tener la dirección provincial de Aviación, compré con GyP, le hice un comodato y le entregué el avión (a la provincia), sin gastos para GyP

-¿Pero se compró sin licitación?

-No, eeeh… hubo un concurso de precios. Averiguamos precios en el mercado y demás… Los concursos de precios que podés hacer. Pero lo tenés también en la web: valor, cómo se pagó…

-¿El avión se lo compraron al empresario Claudio Urcera?

-Sí.

-¿Es amigo suyo o de Sapag?

-Yo lo conozco del gobierno también. No hay empresario que yo no conozca.

-¿De verdad ustedes estaban convencidos de que eran áreas marginales? ¿No sabían el valor que tenía eso cuando asignaron Amarga Chica y otras áreas?

-¿Les contó Sapag la anécdota mía con Exxon? En 2007/2008 cuando entré al gobierno me dan Hidenesa. Voy y le faltaban los últimos tres estados, tenía una previsión de juicio impresionante, estaba hecha pelota. Le dije al gobernador: "Tenemos 60, 70 áreas no sea cosa que nos embarguen, ¿por qué no formamos una empresa? Esa fue GyP. Después tomamos la decisión de armar las primeras rondas… Íbamos y nos quedaban desiertas. Nadie aceptaba invertir en las áreas. Amarga Chica en una primera oferta me quedó libre. Le propongo al gobernador que vayamos a colocar los bonos en Nueva York y pedir a los estructuradores que nos permitieran refinanciar los Ticap. Se hablaba del tigh en esa época no del shale. Así fuimos a Estados Unidos, le dejamos a Exxon las carpeta: "Me quedan dos áreas desiertas, fíjense si tienen interés". Me pidieron un par de días. En 48 horas me llamaron. A los 10 días nos confirman que estaban interesados: "Tomamos esta área".

-¿Qué año?

-Fines de 2008. Nos impresionamos. Sapag recontento. Al mes me invitan a un congreso con los 10 principales geólogos del mundo, organizado por Exxon. Me invitan. Hay una cena, cuando llego, me ubican a la mesa número 1. Yo me pensé que me daban la 40. Ahí pienso: lo que le dimos a esta gente vale mucho. Lo llame a Sapag. Me sentaron con el vice internacional de Exxon. "Lo que tenemos vale mucho".

En el lapso de pocos años, Guillermo Coco y su esposa Alejandra Gorri formaron cinco sociedades, y en la mayoría de ellas aparece invariablemente un socio: Marcelo Guth, dueño de una cantera de áridos en Cipolletti.

Una de las firmas le generó a Coco un dolor de cabeza: la constituyó en el rubro energético en momentos en que ya era hombre clave del gobierno en el trato con las empresas petroleras. Cuando "Río Negro" hizo la revelación, el funcionario explicó que la firma "era para transferir bienes a mi nombre y venderlos desde esa SRL". Pero aún hoy la mantiene vigente.

De la única firma que se desprendió fue de Obras y Ductos, una de las principales contratistas del Estado neuquino desde hace años. Pero, llamativamente, el actual ministro y su esposa dejaron abiertas las otras cuatro sociedades, pese a sus nulas actividades aparentes.

Estas son todas las sociedades creadas por Coco o su mujer:

• Patagonia Energy SRL, formada en junio de 2008 por Alejandra Gorri (gerenta) y Guillermo Coco. Puede alquilar desde máquinas viales y equipos de generación de energía hasta construir gasoductos y usinas. Dijo que la constituyó para transferir bienes que estaban a su nombre y venderlos desde esa sociedad. Coco era entonces secretario de Recursos Naturales y ya piloteaba las negociaciones con las compañías petroleras.

• Menos de dos años antes, había constituido Los Palmares SRL (26 octubre de 2006), inmobiliaria, agropecuaria y forestal. Los socios: Guillermo Coco y Marcelo Guth (gerentes) y Ana Tamargo.

• El mismo día constituye Las Tranqueras SRL. Su actividad principal: extracción y recolección de productos forestales. Los socios fueron Gorri y Guth. En febrero de 2010 Guth renuncia como gerente, cede su parte a Aurelia Cara Monte y se designa a Gorri al frente.

• Apenas un mes antes abrió Mesetas del Lago SRL con su esposa Gorri, Marcelo Guth (gerente) y Carlos Claros. Idénticas actividades: inmobiliaria, agropecuaria y forestal.

• La esposa de Coco era accionista de Obras y Ductos del Comahue SRL, que fue inscripta en el rubro de "fabricante", con una veintena de empleados en Neuquén. La formó Coco en 2004. Pero en marzo de 2008, Gorri le cedió a Leonardo Esteban sus cuotas sociales. Esta empresa participa en varias licitaciones del Estado neuquino y le fueron adjudicadas obras en localidades de la provincia.

-Coco, díganos por qué constituyó varias empresas y las mantiene abiertas.

-Había una sola sociedad que tenía como empresa y estaba ligada a obra pública: Obras y Ductos, cuya razón social hicimos en 2004 con (Marcelo) Guth. Entre 2007 y 2008 la vendí y nos separamos, no porque yo viniera al Estado.

-Pero Obras y Ductos participó y ganó licitaciones del Estado…

-Sí, pero también tenía una sociedad que entró en el reparto de las propiedades: Los Palmares, y había otro socio que también es contratista del Estado: Walter Vasallo. Formamos la sociedad para un barrio privado. Cuando divido y me voy, dentro del arreglo con Guth, le cedo la propiedad de Los Palmares.

-Pero Guth interviene también en sociedades con su esposa…

-No, no, no. Se confunden con Las Tranqueras. Las Mesetas es anterior, 2006, y es inmobiliaria. (N de al R: Guth estaba en las dos como socio).

-¿Estaba o no Guth?

-Sí, sí por eso… Y las Tranqueras también porque las utilizamos para dividir bienes inmuebles. ¿Por qué estaba mi mujer y yo no en Obras y Ductos? Porque yo vivía en el exterior: 15 días en Argentina y 15 en Chile. Es por esa razón que pongo a mi señora en esa sociedad.

-¿Y por qué siguen vigentes?

-Esto es así: Obras y Ductos quedó con Leonardo Esteban, el ingeniero que estaba ahí…

-Díganos por qué no las cerró.

-Las Tranqueras sí, cobra rentas y está a nombre de mi señora. Ninguna relación con empresas petroleras ni del Estado. Mesetas del Lago está cerrada, no sé si está inmovilizada con llave… ¿Por qué hacíamos estas sociedades también? Porque cuando teníamos obra pública, el gobierno nos incentivaba dando tierra para desarrollar e invertir parte de la plata en el desarrollo de esas tierras. De hecho a nosotros nos habían adjudicado -no me acuerdo en qué sociedad que después se la quedó Guth- unas tierras. Metimos 200.000 dólares, se perdió todo…

-Insistimos, no aparecen cerradas…

-No… Mesetas del lago (se fija en papeles)… no, no está cerrada. Pero no hay movimiento. Quedó ahí. Tampoco quise cerrarla porque en realidad tenía una cantidad de sociedades que, tenerlas abiertas o cerradas… porque tampoco sé que hago con las propiedades… porque… después vamos a hablar de Patagonia Energy.

-Ésa surge después.

-Surge porque yo tengo muchas propiedades a mi nombre; propiedades, equipos, grupos y demás. No había alcanzado a meterlos en ninguna sociedad anónima porque mucho de ese patrimonio fueron arreglos míos con las compañías cuando me retiré. Yo decía: "No me des indemnización, dame equipos", después los alquilo, los trabajo… Yo tengo propiedades y demás cosas que, de a poco, las voy pasando a sociedades. A nombre de Guillermo Coco. Que tampoco me deja a veces mi contador pasarlas… (Sigue mirando papeles) Del Lago no tiene nada. Los Palmares me retiré. De Obras y Ductos me retiré. Y mi otro socio (Vasallo) tiene dos empresas trabajando en el Estado (…).

-¿Cómo surgió Patagonia Energy?

-Nunca fue empresa, es sociedad. Nunca operó. Era una chanza con mi jefe chileno. Se retira y dice: "Voy a poner una empresa". Yo tenía armada la sociedad antes de llegar al gobierno y la teníamos ahí para renta de alquileres. A mí me quedan grupos electrógenos. Lo cierto es que cuando entro al gobierno se produce un accidente, casi se electrocuta uno de los operarios, y le dije a mi contador: "Sacame urgente cualquier cosa que se alquile, que pueda ir contra mis bienes, armá una sociedad, meté los bienes ahí". Va al Boletín Oficial. Me llama el gobernador: "Te van a hacer mierda la prensa, la oposición…". Respondo: "Pero ¿qué querés, que esconda mis cosas? Si eso es mío". Yo hice la mía, fui a fondo y al pedo porque se armó un quilombo… me asustó, me retrotraje y dije: "Mirá, no hagan un carajo, dejame esos equipos grandes parados, seguime alquilando algunos chicos". Y quedó ahí, inactiva. Ahora no la voy a cerrar porque no sé si la voy a necesitar para meter algo.