Las fiscalizaciones se llevaron a cabo en conjunto con la seremi de Salud, la Gobernación Marítima, la Dirección Regional del SAG, la seremi de Transporte y Telecomunicaciones, y la Dirección General de Aguas, comprendiendo tanto actividades de inspección ambiental en terreno, como exámenes de información de seguimiento ambiental.

La formulación de cargos de la SMA considera 17 infracciones imputadas a la estatal ENAP Refinerías. Entre ellas, la superación de los niveles de emisión de material particulado, monóxido de carbono, dióxido de nitrógeno y dióxido de azufre comprometidos para una de sus calderas; la superación de los niveles de emisión de dióxido de azufre y óxidos de nitrógeno en la Unidad Recuperadora de Azufre (URA) N° 2; el inadecuado control de emisiones de hidrocarburos volátiles provenientes del estanque T-3350.

ENAP, por su parte dijo estar “estudiando los antecedentes del caso, de modo de aportar toda la información requerida en los plazos establecidos por la ley”.

“Este proceso sancionatorio se inició con las fiscalizaciones que la Superintendencia de Medioambiente llevó a cabo a contar de 2013, oportunidad en la que nuestra empresa entregó todos los antecedentes requeridos por ésta, en el tiempo señalado por la misma autoridad. A la fecha nos encontramos a la espera del informe con las conclusiones y resultados que arrojó dicha fiscalización”, afirmó.

Agregó que “desde el 1 de diciembre pasado, ENAP Refinería Aconcagua constituyó el Consejo Ciudadano Nueva Era, instancia de participación inédita que busca que los vecinos de Concón puedan ser verificadores activos de los compromisos medioambientales que ERA mantiene vigentes”.

La empresa tendrá 10 días de plazo para presentar un Programa de Cumplimiento, que es un plan de acciones y metas destinado por el titular a enmendar sus problemas mediante las inversiones necesarias para cumplir con la normativa aplicable. De lo contrario, cuenta con 15 días de plazo para formular descargos ante la SMA.