El índice por región reveló incrementos importantes en la RM, XI y XII como consecuencia de los cortes prolongados de suministro eléctrico tras el temporal de viertes vientos que azotó la zona centro-sur el sexto mes del año.
Este año ha sido duro para la industria distribuidora de suministro eléctrico, mercado en que el participan CGE, Enel Distribución y Saesa, entre otros.
En lo que va de 2017 se han registrado tres eventos climáticos que han ocasionado cortes con un peak de más de 200 mil clientes sin suministro eléctrico. El último ocurrió el pasado fin de semana cuyo, sistema frontal que afectó a Bío Bío y La Araucanía.
Lo inusual de los eventos -con fuertes vientos y nevazones- hace a la industria anticipar que los índices de continuidad del suministro superarán los registrados en 2016, donde en promedio los hogares estuvieron unas 13,5 horas sin suministro eléctrico, transformándose en el mejor año desde el inicio de la medición en 2012.
Las primeras cifras emanadas de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) tras el paso del primer sistema frontal que afectó a la zona centro sur durante la temporada de invierno así lo confirman: si en promedio el organismo regulador recibe unos mil reclamos por interrupciones al mes, en junio estas llegaron a más de 10 mil (ver gráfico). Esto, luego de que los índices de interrupción llegaran a su peor nivel desde la implementación de la medición Saidi, sistema informático que permite medir las interrupciones que se producen en el territorio nacional
Producto del evento climático que se inició el 16 de junio, se reportaron vientos inusuales que alcanzaron los 80 km por hora. En este escenario, la SEC reportó unos 200 mil hogares sin suministro eléctrico por más de 20 horas. Por ello, se procedió a formular cargos a 13 empresas, entre ellas, Chilquinta, CGE y Saesa. A la fecha el órgano supervisor aún no informa las multas aplicadas.
En este contexto, en el sexto mes del año los reclamos recibidos por la SEC por interrupciones se multiplicaron por diez. Además, si se analiza la evolución de lo reclamos que no tienen relación con interrupciones, estos también presentaron un peak en el año, igualándose con el peor mes de 2016, con sobre los 1.500 reclamos. De estos, el mayor porcentaje -con cerca del 34%- se debe a cobros excesivos o indebidos.
Según cifras del propio organismo, del total de reclamos recibidos este año, un 63,37% ha sido rechazado por las distribuidoras, mientras que un 28,31% ha sido aceptado y 8,32% parcialmente aceptado; cifras similares a las presentadas en 2016.
En tanto, el índice Saidi, revela que en la Región Metropolitana las interrupciones se elevaron un 300% durante el sexto mes del año en relación con igual periodo del año anterior.
En el desglose, los segmentos que explican el alza son las fallas internas, es decir interrupciones por problemas de la empresa de distribución, y causas de fuerza mayor. En ambos casos, las fallas se multiplicaron por cuatro en relación con igual mes de 2016.
En tanto, si se analiza la XI Región y la XII Región, la situación es aún peor. En el caso de la primera, el índice se eleva a 3,87 horas sin suministro en junio, cifra bastante más elevada que las 0,84 horas de igual mes del año pasado. En la XII Región, en tanto, el indicador arrojó 17,15 horas, versus las 0,93 horas de 2016.
Si se analizan las multas, estas han estado en línea con períodos pasados en términos de número, pero por debajo si se toma en cuenta el monto.
Durante el primer semestre se han sancionado a las empresas distribuidoras con $2.933 millones, monto 54,6% menor a lo registrado en igual periodo de 2016.
¿La razón? Si bien desde la SEC han formulado cargos por los temporales de junio y julio, estos aún no concluyen en sanciones. Es probable que estas estén presentes una vez que se consoliden las del año.
