Statoil, petrolera controlada en un 67% por el Estado noruego, pasará a llamarse Equinor como reflejo de la nueva estrategia de la compañía, que busca transformarse en un grupo energético con mayor presencia de las energías renovables en su cartera, según ha informado la empresa, que hará oficial el cambio de nombre en la junta general de accionistas que celebrará el próximo 15 de mayo.
"El nombre Equinor captura nuestra herencia y valores, así como qué queremos ser en el futuro", indicó el presidente y consejero delegado de Statoil, Eldar Satre.
La compañía señaló que el elemento compositivo "Equi" supone el punto de partida para palabras como equilibrio y equidad, mientras "Nor" expresa orgullo por su orígenes noruegos. "Creemos que el nombre dice algo importante de nosotros: ¿Qué defendemos? ¿De dónde venimos y cómo vemos el futuro?", explicó la petrolera.
El cambio de nombre será sometido a votación en la junta del próximo 15 de mayo, donde el Gobierno de Noruega, accionista mayoritario de la compañía con un 67%, que ya ha expresado su apoyo a la nueva denominación, votará favorablemente.
Por su parte, los cinco sindicatos que agrupan la representación de los trabajadores de Statoil, (Industri Energi, SAFE, NITO, Tekna y Lederne) han expresado su respaldo a la propuesta de cambio de nombre, señalando que "es natural que adopte una denominación que refleje mejor todas las clases de energía que produce: petróleo, gas y renovables".
La estrategia de Statoil, presentada en 2017, establece unos principios claros para el desarrollo de una cartera diferente y competitiva. Statoil apuntó que está desarrollando una posición industrial en energías renovables y prevé invertir en nuevas soluciones energéticas entre un 15% y un 20% de su gasto de capital (capex) para 2030.
"Registramos unos resultados sólidos en 2017 y actualmente estamos en una posición sólida. Hemos reforzado nuestra competitividad, mejorado radicalmente nuestra cartera de proyectos y contamos con una estrategia clara para el desarrollo de la compañía", añadió el presidente de Statoil, subrayando que el nuevo nombre refleja el posicionamiento de la compañía de cara a crear valor a largo plazo en un futuro de bajas emisiones de carbono.
