La empresa Pampa Energía desmintió que esté en estudio la venta de su participación mayoritaria en la distribuidora eléctrica Edenor.
La versión, dijeron voceros de la compañía, surgió tras una visita a empresas chinas generadoras de electricidad y fondos de inversión, organizada por el banco estadounidense JP Morgan Chase.
"El objetivo de estas visitas es mantenerse como un socio potencial si quisieran invertir en Argentina", explicaron los voceros.
Los inversores minoritarios de Edenor, la mayor distribuidora eléctrica de la Argentina, tenedores del 9% de sus acciones en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires y del 12,6% en la de Wall Street (New York Stock Exchange), seguían con atención las alternativas sobre la eventual venta del paquete mayoritario de la compañía, cuya valoración bursátil ronda los US$ 830 millones.
El dato que circuló en ámbitos de negocios la semana pasada, sin confirmación oficial, señalaba que el holding (la empresa integrada de electricidad más grande del país) había seleccionado al JPMorgan Chase & Co. como asesor de la supuesta operación.
Edenor es la principal distribuidora, tanto en cantidad de clientes como de electricidad vendida (en GWh y en pesos), a partir de su concesión exclusiva en el noroeste del Gran Buenos Aires y en la zona norte de la Ciudad de Buenos Aires.
En un área de 4.637 kilómetros cuadrados la empresa atiende a una población de aproximadamente siete millones de habitantes (2,5 millones de clientes).
El destino de Edenor es también relevante para el Estado nacional, toda vez que el 27% de sus acciones pertenecen a la Anses (Administración Nacional de la Seguridad Social), que recibió ese activo tras la estatización de las carteras que las AFJP gestionaron hasta 2008.
La empresa podría desprenderse del 51,4% que posee y seleccionó a JPMorgan Chase & Co. entre más de cinco bancos para asesorar la posible operación.
Pampa Energía SA analiza vender su participación mayoritaria en Edenor. La empresa podría desprenderse del 51,4% que posee y seleccionó a JPMorgan Chase & Co. entre más de cinco bancos para asesorar la posible operación, que aún se encuentra en la etapa de exploración temprana.
Pampa, la compañía de energía más diversificada de Argentina, está buscando deshacerse de una de sus unidades más reguladas, mientras el país se dirige a una elección presidencial en octubre, donde la reelección del presidente Mauricio Macri está en duda. Edenor había prosperado bajo la iniciativa de Macri de liberalizar los precios de la energía y abolir la política de congelación de las tarifas eléctricas de su antecesora, Cristina Kirchner.
Representantes de Pampa, con sede en Buenos Aires, y JPMorgan, con sede en Nueva York, declinaron hacer comentarios. Los funcionarios de Edenor tampoco respondieron. Las personas familiarizadas con las consideraciones de Pampa pidieron no ser nombradas ya que los planes son privados.
La capitalización de mercado de Edenor fue de alrededor de u$s825 millones el martes, y una venta podría ser uno de los mayores acuerdos de fusiones y adquisiciones de este año en Argentina.
La legislación vigente prescribe que un comprador de una participación mayoritaria debe ofrecer comprar las acciones por al menos el precio promedio en los seis meses inmediatamente anteriores al anuncio de un cambio de control.
El negocio de Edenor incluye el acceso a algunos de los mercados más prósperos de Argentina, como la zona noroeste del área metropolitana del Gran Buenos Aires y la parte norte de la ciudad. El sistema local de pensiones controlado por el Estado posee el 27% de las acciones y el resto se cotiza en las bolsas de Buenos Aires y Nueva York.
